CIERRE DEL PROYECTO

Sagrado Corazón

Durante la realización de este proyecto estuve muy emocionada ya que me alegraba el hecho de saber que niños con menos posibilidades económicas podían convertirse e interesarse en ser buenos líderes para que así contribuyan a un mejor país. Se planificó diferentes actividades, que involucraban resolución de problemas, trabajo en equipo, respeto y tolerancia, capturar el mensaje de películas y sketch y salir a hablar en público. A través de este proyecto pude adquirir una mayor conciencia de mis propias cualidades ya que era la que guiaba a mi equipo y les daba las pautas para que ellos también empiecen a dirigir; mostré perseverancia y compromiso personal en las actividades que realizábamos y propuse y planifiqué algunas dinámicas.

Personalmente aprendí que para poder tratar con los niños de un colegio nacional, se debe captar su atención y lograr que ellos se respeten entre unos y otros. Debido a que si no se tiene respeto, no se puede llegar a nada, ya que el respeto es la base de todo líder. Aprendí a no rendirme tan rápido y a lidear con los desafíos que se me presenté; ya que al principio fue un poco complicado el idear nuestro plan de trabajo o hacer que todos e involucren de igual manera. 

La realidad de esos niños es completamente diferente a la mía y a la de mis compañeros, sin embargo eso no significa que no se pueda aprender de ellos así como ellos pueden aprender de nosotros. Lo económico no es una barrera y menos un límite para poder compartir y enriquecernos cultural y socialmente. 

Siempre recordaré este proyecto ya que a pesar de que se culminó en un corto plazo, el tiempo que compartí con esos niños fue inolvidable y completamente enriquecedor para mí, ya que aprendí de ellos a que se puede ser feliz a pesar de todas las complicaciones que se presente en nuestro camino.

De ahora en adelante daré lo mejor de mí y trataré de no desanimarme ante cualquier obstáculo que se me presente. La fortaleza se va ganando con la superación de cada desafío que tenga y eso lo pondré en práctica para toda mi vida. 

Como equipo considero que trabajamos con respeto y efectividad, pero aún así en mi opinión, diría que si algunos se involucraban un poco más, cada momento que compartimos con los niños pudo haber sido mucho más placentero y organizado. Además de brindarles un mejor aprendizaje de cómo ser líder a ellos.

Finalmente puedo decir que este proyecto fue una prueba para cada uno de nosotros y que nos enseñó a que si todos no nos involucramos pues los objetivos no se cumplirán en su totalidad. Sin embargo eso no significa que los que sí se involucran no den lo mejor de sí para poder sacar adelante la actividad. Aprendí mucho de este proyecto y sé que me ayudará para futuras actividades en las cuales las dificultades de equipo se me presenten. JUNTOS SOMOS MÁS!!